Coninagro publica esta herramienta para que el productor agropecuario pueda hacer un seguimiento de los indicadores que se analizan. Mirá en detalle el relevamiento de las 19 economías regionales monitoreadas por el área de Economía de CONINAGRO, con cifras que surgen con datos relevados durante el mes de enero 2022. El “Semáforo de Economías Regionales” busca simplificar la complejidad y heterogeneidad de la producción en el campo hacia una herramienta visual de análisis.
Casi todas las Economías Regionales en rojo
La sequía, los costos en suba y los precios estancados ponen en alerta al sistema productivo.
Destacados del Semáforo de Economías Regionales de febrero
Una situación compleja. El semáforo presenta cambios por la sequía en las actividades del litoral respecto del semáforo del mes anterior (yerba, forestación, mandioca, cítricos dulces) . Un empeoramiento por el granizo y las heladas en vino, peras y manzanas, la falta de mercados en maní, los costos en papa y en leche.
Los colores. 11 actividades en rojo, 6 amarillo y 3 verdes. Es el mes en que más rojos hubo desde 2019.
Precios y costos. El promedio simple de los precios de las actividades relevadas crecieron 45% en términos interanuales en ene-2022, estando por debajo del 50,7% de la inflación oficial. Mientras que el promedio de los indicadores de costos crecieron en el mismo período 72%.
Coninagro en la Fiesta Provincial de la Papa
El presidente de la entidad cooperativa, Carlos Iannizzotto comentó en rueda de prensa que: “La actividad productiva que hoy nos convoca aquí en Mar del Plata, la papa, es el tercer cultivo alimenticio en el mundo, luego del arroz y del trigo. La producción mundial alcanza, aproximadamente, a los 370 millones de toneladas, siendo China, India y Rusia los principales productores”, sostuvo Iannizzotto en su visita a la ciudad costera, en el marco de la 43° edición de la Fiesta Provincial de la Papa.
Argentina produce aproximadamente 2 millones 800 mil toneladas, destinándose, para ello, entre 75 a 80 mil hectáreas de nuestro territorio nacional. La papa es, por lejos, la hortaliza más consumida en el país y es el alimento tradicional de la dieta de los argentinos con una ingesta
de casi 41 kilos anuales por habitante.
Las principales regiones productoras de papa, según la superficie cultivada en la campaña 2019/2020 son: Buenos Aires con el 55%, Córdoba – San Luis 30%, Tucumán 8%, Mendoza 5% y menor proporción en Jujuy, Salta y Santa Fe. El resto de la superficie la generan San Juan, Chubut y Río Negro, ampliando el espectro de producción en sectores no tradicionales
de producción papera.
Por su parte, Mario Raiteri, consejero de Coninagro y vicepresidente de la Federación Nacional de Papa, comentó que: “estamos acompañando la visita del presidente de nuestra entidad y estaremos en Comandante Nicanor Otamendi en la Fiesta de la Papa este fin de semana, en un encuentro de productores donde relevamos el área sembrada satelitalmente, y eso clarifica la situación de esta economía regional. y nos da un panorama de aquí hasta junio, ya que en esa época empieza a producirse en otra zona”.
A lo que agregó: “necesitamos medidas de mediano y largo plazo, hoy no somos sujeto de crédito ni tenemos ventajas impositivas, hoy hay 80 mil hectáreas sembradas de papa en manos de 400 productores, necesitamos que haya más productores. La principal preocupación es la incertidumbre que nos va trayendo esta situación favorable que se ve en los commodities, en una producción como la papa que tiene costos en dólares pero vende en pesos, nos trae preocupación”.
“Hoy la ecuación económica no da, no sé si vamos a poder sostener este ritmo de superficie sembrada”, remarcó Raiteri.
“Enfrentamos suba de insumos, de fitosanitarios, de fertilizantes, de alquileres, de combustibles, porque los dueños de los campos piensan en función de maíz, trigo, soja y girasol”, redondeó Raiteri.
Porcinos
El comienzo de año encuentra al sector porcino con ligera rentabilidad positiva pero con
ciertas incertidumbres y expectativas. Por un lado, las crecientes importaciones de cortes congelados de cerdo provenientes de Brasil que van directamente a la góndola y no a la
industrialización, compiten en forma directa con los cortes frescos locales
generando una caída en la demanda previo al período otoño-invierno en el cual
naturalmente baja.
“Hoy está un poco frenado el consumo, porque está viniendo cerdo de afuera. Está entrando cerdo de Brasil congelado y se vende como carne fresca, eso frena nuestra actividad y la venta de animales en pie. Los compradores bajaron el precio a los animales en pie y a los productores nos aumentaron mucho los costos, el los cereales, como maíz y la soja. Casi no hay rentabilidad, el margen que tenemos es muy acotado”, relató Juan Martín Tanzi de la Cooperativa Granjera de Ascensión.