CONINAGRO coincide plenamente con lo expresado por la presidente Cristina de Kirchner en que los productores nucleados en forma de cooperativas pueden tener un rol estratégico en la generación de producción y empleo. Ese es el verdadero espíritu del movimiento que representamos. Nuestros objetivos no se limitan a la integración, sino también a ser los artífices de nuestras propias empresas capaces de producir, comercializar, exportar y fabricar insumos. Ese convencimiento pleno en el sistema cooperativo, ha sido la base y fundamento para creer que el gran desafío es integrar a pequeños y medianos productores. El asociativismo está en la génesis del sistema cooperativo, el que sostiene la solidaridad como valor indiscutible de una economía que jamás descuida lo social.
Esperamos que las expresiones presidenciales sobre el agregado de valor en productos y la participación de los productores en la rentabilidad de los mismos, no queden en una simple declamación frente a un auditorio que necesita comprensión y asistencia.
CONINAGRO, como genuina representante del cooperativismo agropecuario, entiende que así como tantas veces expresamos las diferencias de visión con el gobierno y las falencias de muchas decisiones, debemos sumarnos a los conceptos expresados. Pero existe en nuestro hombre de campo la imperiosa necesidad que las palabras escuchadas, sean un gesto de buena voluntad signifiquen un punto de inflexión para morigerar políticas que han producido la desaparición de 60.000 productores.