Ya comenzamos a transitar el segundo trimestre de este año electoral que no se presume sin complicaciones para los productores agropecuarios. Los indicadores económicos muestran situaciones de quebranto para varias economías regionales, que generan zozobra en muchas localidades del mapa nacional. Los hombres de campo comienzan a inquietarse y desde las entidades comenzamos a sentir el cambio de humor, el temor a perderlo todo, o a hipotecar el futuro.
Esa sensación de incertidumbre, por la situación económico financiero, por problemas climáticos o directamente productivos, genera presión de las bases, que en las reuniones periódicas que realizamos por todo el país, quedan expuestas en forma de reclamo. Las medidas de protesta – cese de comercialización, asambleas u otra cualquiera sea – son el emergente del reclamo del productor que quiere hacer oír su voz.
Desde CONINAGRO determinamos las acciones gremiales de acuerdo a la opinión de los productores, nuestros representados y mandantes, y acompañamos el sentir de cada uno de los representantes de nuestras economías.
La fluidez de los diálogos y de las relaciones, en el marco del movimiento cooperativo agropecuario, nos permiten accionar de acuerdo a las necesidades de cada actividad.
Solos o junto a las restantes entidades que conformamos la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias, continuaremos este año dando a conocer las necesidades y la situación de los productores que representamos. No dejaremos de realizar una acción aun a sabiendas de que quienes deciden no tienen en agenda nuestras prioridades. Además, tenemos la responsabilidad de dar a conocer a quienes aspiran a conducir el país, en el ámbito nacional, provincial o municipal, los puntos de interés que debería corregir o brindar un nuevo gobierno.
En todos los aspectos, desde la interacción productor-entidades hasta entidades-sector político, nos imponen la necesidad de dar lugar a un nivel de dialogo claro y sereno, sin traicionar los valores que hemos defendido durante nuestra historia de gremialismo agropecuario. Los productores sabrán valorar no solo las acciones y gestiones, sino la coherencia en el reclamo.
En todo esto, va nuestra tarea. Acompáñennos!
Egidio Mailland
Presidente de CONINAGRO