Desde la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias advertimos que la situación que atraviesa el sector es grave. Venimos padeciendo hace años un modelo que determina una brutal concentración económica. En materia agropecuaria, el gobierno nacional decidió garantizar ganancias a enormes corporaciones. Así, en lugar de crear herramientas virtuosas que permitan poner equilibrio, se intervino de manera pésima a través de la Secretaría de Comercio Interior en los mercados granarios y las cadenas de comercialización de todos los rubros. El modelo privilegia a un puñado de firmas exportadoras y a grandes empresas que con el aporte de capitales financieros ajenos al sector se integran verticalmente y desplazan al sujeto agrario tradicional. Entre 2003 y 2008 esto ya había determinado la desaparición de más de 60000 pequeños y medianos productores.
Los problemas estructurales se agravaron en la última campaña, por la fuerte sequía que azotó al país. La Argentina perdió por factores climáticos sólo en esta cosecha más de 20 millones de tn. de granos, entre maíz y soja. Ante la emergencia climática, hubo un compromiso de Norberto Yauhar en enero último de facilitar mecanismos de asistencia financiera que jamás se concretaron. En este marco, el gobierno no dio soluciones ni volvió a citar a ningún espacio de diálogo. Por el contrario, se apeló nuevamente a la construcción del relato, ocultando públicamente los efectos de la sequía.
Consumada la baja de los rindes, se empezó a evidenciar un amesetamiento económico de los pueblos del interior, que ahora se verá agravado por los manotazos fiscales que ya se están dando en las provincias. Ante el ahogo financiero al que son sometidos sus territorios por parte de la administración central, gobernadores como Daniel Scioli y Sergio Uribarri ya han respondido mansamente en lugar de discutir un nuevo marco de coparticipación de los recursos.
Con relación al transporte, las disposiciones 36/12 y 37/12 y la resolución 3292/12 de la Secretaría de Transporte, de manera inconsulta y arbitraria, en algunos casos duplican el costo del mismo perjudicando a las economías que se encuentran más alejadas de los puertos.
Por su parte, los productores lecheros de todo el país se movilizaron, realizaron asambleas y se concentraron frente a las industrias lácteas. La Secretaria de Comercio Interior, dándoles la espalda, firmó un acuerdo con la industria que fijó un aumento del 7%, aumento que no sólo resultaba insuficiente ante el reclamo de los productores, sino que nunca se cumplió.
La pérdida de competitividad de las economías regionales es una creciente preocupación. El aumento del costo de los insumos, de la mano de obra (en muchos casos, intensiva), el encarecimiento del transporte, amenazan su subsistencia. Es necesario generar un entorno competitivo que propicie el crecimiento y el desarrollo en el interior del país.
La comercialización de los productos agropecuarios, granos, carnes y lácteos entre otros, se ve afectada día a día como consecuencia de la intervención por parte del gobierno, mediante acuerdos y cupos de exportación. Es así que se destruyó en los últimos seis años el mercado de trigo, estimando para la presente campaña una disminución aproximada en la intención de siembra del 48%, vislumbrándose el mismo efecto negativo en la comercialización del maíz y otras producciones agropecuarias.
La ganadería argentina tuvo históricamente en la cuota Hilton la posibilidad de ingresar divisas extras al país, hecho este que no se materializará en el corriente año como consecuencia de la desidia en la forma y en la demora de su adjudicación. Estamos a 25 días de la culminación del ciclo comercial de la cuota Hilton 2011 – 2012 y sólo se cumplió con el 49% de dicha cuota, por lo que el país va a perder la posibilidad de ingresar divisas por cerca de 200 millones de dólares (900 millones de pesos), siendo este el quinto año que incumplimos con esta cuota.
Sumado a todo lo expuesto, no debemos olvidar que nuestro sector, como consecuencia de los derechos de exportación, en algunas actividades vende su producción a un dólar de $ 2.80, adquiriendo muchos de sus insumos a un dólar valuado entre $ 5.80 y $ 6, fruto de las crecientes restricciones implementadas a partir del 31 de octubre de 2011. Este es un nuevo golpe a la rentabilidad productiva que se ha visto disminuida significativamente en los últimos años, producto de una inflación no reconocida por el gobierno nacional que afecta nuestros costos y que no se ve reflejada en la venta de nuestra producción.
Ante esta situación, desde la CEEA entendemos que las altas cargas tributarias tendrán un impacto negativo no sólo en los productores rurales sino en toda la población, ya castigada por el techo salarial que pretende poner el gobierno a los sectores obreros en las negociaciones paritarias y la fuerte caída del ingreso que se advierte por efectos de la inflación que triplicará los cada vez menos creíbles índices oficiales.
Con fecha 26-1-12 el Ministro Yauhar, en su despacho y ante los presidentes de las cuatro Entidades, se comprometió a conformar a conformar una mesa política para tratar los temas productivos que nos preocupan, relacionados con las siguientes actividades:
1. Granos
2. Carne bovina
3. Lechería
4. Financiamiento – arrendamiento de tierras – capital de trabajo e inversiones
5. Riesgo climático – emergencia – sequía – inundación
6. Presión impositiva
7. Sector porcino
8. Sector ovino
9. Sector caprino
10. Algodón
11. Frutas y hortalizas
12. Yerba mate
13. Vitivinicultura
14. Arroz
15. Ajo
16. Sector tabacalero
17. Apicultura
18. Negociaciones Mercosur – Unión Europea / OMC
19. Forestación
20. Seguridad Jurídica
21. Transporte
Lamentablemente, dicha mesa no se conformó y nunca fuimos convocados para tratar los temas enunciados.
Es por ello, que con fecha 24-5-12 la CEEA, mediante nota, reiteró el reclamo solicitando al Ministro una audiencia para tratar los temas antes referenciados.
Hoy, 5 de junio, no fuimos convocados ni recibimos respuesta alguna a la nota presentada.
Es por eso que anunciamos:
CESE DE COMERCIALIZACIÓN DE GRANOS, CARNES Y PRODUCTOS AGROPECUARIOS NO PERECEDEROS DESDE LAS 0 HS DEL MIÉRCOLES 6 DE JUNIO HASTA LAS 24 HS. DEL MARTES 12 DE JUNIO.
Buenos Aires, 5 de junio de 2012